En tiempos en que la fama y el éxito de ventas no garantizan la grandeza literaria, hay autores en cuyas referencias se puede confiar, doy fe, a sabiendas de que no soy nada original, P. Auster es uno de ellos.
Esta vez es 'Un hombre en la oscuridad' el libro que quiero recomendar, y digo libro porque no estoy muy seguro de que se trate de una novela, al menos en el sentido en que acostumbramos emplear el término. Más bien Auster nos presente una amalgama de relatos magistralmente ensamblados y acoplados a un hilo conductor; una excursión al proceso en el que presumiblemente se fraguan sus historias.
La novela, llamemoslá así, arranca en el inquietante escenario de una guerra civil que se libra en los Estados Unidos de América. Tras las polémicas elecciones en las que Bush se impuso a Gore los acontecimientos no se sucedieron del modo en que todos conocemos; algo quebró el equilibrio en apariencia imperturbable de la democracia americana, para desembocar en un conflicto que dividió a los Estados Unidos en dos fuerzas ferozmente enfrentadas. Pero ese marco y ese escenario no es sino una realidad paralela en la que, convertido en soldado, despierta Owen Brik, un anónimo ciudadano que vive en la Ámérica real, al que se le encarga una delicada y delirante misión: asesinar al artífice de esa guerra, el viejo escritor que la imagina en sus noches de insomnio, el mismo que al hacerlo la convierte en realidad.
Pero la novela no se agota en la hipótesis de una alucinante historia alternativa; la narración intercala el plano de la guerra imaginada con los recuerdos y las vivencias más íntimas del escritor y su familia, hasta que en un momento dado es el plano existencial el que acapara por completo la atención, sumergiendo al lector en una sucesión de relatos y anécdotas que en su conjunto constituyen un escalofriante y emociando alegato contra todas las guerras habidas.